El ministro de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, Pablo Bustinduy, felicitó este viernes a la Fundación Cermi Mujeres por sus 10 años de lucha para conseguir una sociedad más justa e igualitaria, una lucha que ha quedado plasmada en la reforma del artículo 49 de la Constitución, que incluye un párrafo específico para este colectivo: «Se atenderán particularmente las necesidades específicas de las mujeres y los menores con discapacidad». Además, anunció la realización de un macroestudio sobre las violencias que sufren las niñas y las mujeres con discapacidad.
Así se expresó en el Senado donde la Fundación Cermi Mujeres celebra el acto ‘Parlamento de las mujeres con discapacidad: ¡El futuro que queremos’, que tiene como marco el Día Internacional de la Mujer. Un acto al que han acudido 300 mujeres con discapacidad de toda España, que llenaron el Hemiciclo de la Cámara Alta. El objetivo del mismo es evaluar los 10 años de trabajo de la institución, «las conquistas y las reivindicaciones logradas», pero sobre todo, » definir los retos futuros en la política pública, y la adopción final de una declaración de las propias participantes con una hoja de ruta para la próxima década».
El titular de Derechos Sociales criticó en su discurso que «algunos» hayan calificado el logro constitucional de ideología de género» (como Vox aunque no le mencionó) y destacó que «la reforma del artículo 49 de la Constitución no habría sido posible sin vosotras y vuestro trabajo. Esta conquista es un logro para nuestra sociedad porque nos hace mejor país».
El presidente del Senado de España, Pedro Rollán, anfitrión del acto, agradeció a las mujeres con discapacidad «haber elegido el Senado, que es vuestra casa y permitidme que me dirija a vosotras como señorías porque es lo que sois, vais a parlamentar y os corresponde este rango. También deseo que ésta sea la primera sesión de otras más, porque sabed que estas puertas siempre están abiertas para vosotras que defendéis una causa justa, noble, que merece la pena y que nos hace mejores a toda la sociedad».
En el acto también estuvo presente la secretaria de Estado de igualdad y contra la Violencia de Género, Aina Calvo, quien aseveró que «este parlamento que habéis organizado es un hito que todos los presentes recordaremos toda la vida». Y elogió el papel realizado por la Fundación Cermi Mujeres en sus 10 años de historia. «Habéis conquistado muchas cosas, sois unas mujeres valientes, como Ana Peláez, primera mujer con discapacidad en el comité de Naciones Unidas contra la discriminación de las mujeres y vuestra lucha nos ha hecho mejores. Por esto, no me canso de agradeceros vuestro trabajo y sabed que somos conscientes de que la lucha continúa y que no estáis solas. Vuestro trabajo diario es nuestro trabajo diario».
Entre las reivindicaciones pendientes Calvo se refirió a la brecha salarial que sufren las mujeres con discapacidad que cobran un 30,9% menos que los hombres sin discapacidad y «a la violencia de género que afecta al 40% de las mujeres con discapacidad».
El presidente del Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (Cermi), Luis Cayo Pérez Bueno, alabó el activismo de las mujeres con discapacidad, que está muy vivo y es muy fuerte, «un activismo que os confiere tener más presente que pasado y un futuro prometedor por delante porque estáis plenamente instaladas en la acción. Y reconoció como asignatura pendiente del movimiento de la discapacidad que las mujeres del sector tengan una mayor representación en los órganos de decisión. «Sois el 60% pero no tenéis esa cuota de poder», concluyó.
La presidenta de la Fundación Cermi Mujeres, Concepción Díaz Robledo, proclamó que «mirando hacia atrás entendemos que hemos conseguido muchos logros, pero hoy con este primer parlamento de mujeres con discapacidad es el momento de reflexionar juntas y hacer la hoja de ruta de lo que queremos hacer en el futuro». «Ser fuente de inspiración para las políticas públicas. Os pido a todas que participéis en este debate y no olvidéis que las mujeres con discapacidad nos sentimos unidas porque queremos construir una sociedad más justa, con más calidad democrática y debemos conseguir que cualquier reivindicación que propongamos sea acogida por todos para tener un futuro mejor», dijo.