La consejera de Familia, Juventud y Asuntos Sociales, Ana Dávila, visitó los nuevos inmuebles que, al igual que el resto del complejo que da servicio a 149 residentes, tienen el objetivo de posibilitarles la capacidad de vivir de forma autónoma e independiente en pisos, en este caso, con habitaciones individuales y dobles, baño propio, salón, comedor y terraza.
“Esta iniciativa, pionera en España, es un ejemplo del modelo madrileño de atención social en el que estamos inmersos, que apuesta por espacios más reducidos que se asemejan lo máximo posible a la calidez de un hogar”, señaló Dávila.
Las viviendas cuentan con una inversión del Gobierno regional de 400.000 euros procedentes de fondos europeos. La Fundación Astier dispone en este espacio especializado de tres recursos distintos: una residencia con centro ocupacional, con 14 plazas; otra con 45 para personas con discapacidad intelectual en proceso de envejecimiento prematuro; y un Centro de Día para atender a 90 usuarios.