Las personas con discapacidad residentes en Tasmania no acceden a la justicia en igualdad con el resto de la población, según declaraciones realizadas por la Comisionada de Antidiscriminación Robin Bancos. Por este motivo, uno de los objetivos marcados por este Comisionado para el año 2016 es, precisamente, elaborar una estrategia para hacer frente a la desigualdad que sufren las personas con discapacidad en el ámbito judicial, haciendo especial hincapié en la situación específica de las mujeres con discapacidad.
"De hecho", señala Bancos, "muchas mujeres con discapacidad intelectual sufren violencia sexual pero, sin embargo, sigue siendo muy escaso el número de denuncias presentadas y los casos que llegan a juicio por este motivo".
El sistema judicial en Tasmania sigue considerando a las personas con discapacidad en general, y a las que presentan limitaciones cognitivas especialmente, como "personas no creíbles" cuyos testimonios son "menos fiables".
Asimismo, es muy frecuente que la policía considere, por desconocimiento, sospechosa a una persona por razón de ciertos comportamientos derivados de la discapacidad y que no son en absoluto delictivos, pero que despiertan desconfianza. Esto hace que el número de personas con discapacidad con problemas legales vaya en aumento.
La citada estrategia contará con el apoyo del Departamento de Justicia y de la Fiscalía General.
