Este protocolo se enmarca en la Estrategia Nacional para la Erradicación de la Violencia contra la Mujer, aprobada en julio de 2013, y permitirá abordar las situaciones de violencia de género que afecten a las mujeres españolas residentes en el extranjero y, en su caso, a sus hijas e hijos, poniendo a su disposición los recursos y los medios de protección necesarios y facilitando el retorno de las mujeres víctimas de violencia de género.
De esta manera, las mujeres pueden acudir a una Oficina Consular de España en el país en que residan para obtener información y orientación sobre los recursos médicos, educativos y legales a su disposición.
Una comisión mixta de seguimiento hará periódicamente una evaluación sobre el grado de cumplimiento de este convenio que han firmado la secretaria de Estado de Servicios Sociales e Igualdad, Susana Camarero, y los subsecretarios de los departamentos de Asuntos Exteriores, Cristóbal González-Aller y de Empleo y Seguridad Social, Pedro Llorente.
Como señala la propia Estrategia Nacional para la Erradicación de la Violencia contra la Mujer, la proporción de mujeres con discapacidad grave que se siente maltratada por la pareja con la que convive, es 4,6 veces mayor y la de las mujeres con una discapacidad menos grave, dos veces superior que quienes no tienen discapacidad (7,8% y 3,5% frente a 1,7%). En el caso de ruptura de la pareja, el riesgo de maltrato por parte del excónyuge/expareja también es mayor: 11% entre las mujeres con algún grado de discapacidad frente a 7,9% cuando no hay discapacidad. En la misma línea los datos oficiales señalan que el porcentaje de mujeres con discapacidad (reconocida) asesinadas por la violencia machista es 13% de total.
Por todo ello, la Fundación CERMI Mujeres recuerda a los tres Ministerios, Secciones Consulares de las Embajadas, Oficinas Consulares y a las Consejerías, que las mujeres con discapacidad son también víctimas de violencia de género, por lo que se hace necesario que todos los recursos, materiales, campañas, asesoramiento, etc. sean accesibles, tal y como establece la Ley 1/2004, de 28 de diciembre, de Medidas de Protección Integral contra la Violencia de Género.
Puedes descargar el protocolo en el siguiente enlace.