Así lo explica Isabel Caballero, coordinadora de la Fundación CERMI Mujeres (FCM) y autora del estudio: "Fue una corriente crítica que nace del movimiento de mujeres negras de Estados Unidos contra los modelos feministas que solo se centran en una mujer supuestamente única, una mujer blanca, de clase media y con determinados conflictos que deja fuera a muchas otras mujeres, como son las mujeres inmigrantes o con discapacidad, entre otras".
Así, el movimiento de mujeres con discapacidad se articula en torno a lo que daríamos en llamar feminismos periféricos de la década de los 90, pero ofrece una serie de peculiaridades que enriquecen tanto el discurso como la praxis. La diferencia que marca la presencia de la discapacidad es una dimensión muy relevante en este contexto. La teoría de la interseccionalidad aparece además como el marco filosófico y conceptual que anima todo el edificio teórico desarrollado desde la década de los 90 hasta la actualidad.
Según expone el estudio, “la interseccionalidad en realidad fue intuida por algunas mujeres con discapacidad que reivindicaban sus derechos no solo como personas con discapacidad, sino también como mujeres, y por encima de todas las cosas, como mujeres con discapacidad... donde la discapacidad o el género ya no eran los únicos ejes relevantes, sino que era preciso atender a la interrelación de otros constructos sociales que también normativizan la vida de las personas con discapacidad".
El manifiesto del EDF
Así como las mujeres de color no encontraban su sitio en la sociedad norteamericana, las mujeres con discapacidad tampoco eran acogidas de forma adecuada por las organizaciones de la discapacidad, ni por las de mujer. Y es en el año 1997 cuando se produce el cambio fundamental, cuando el EDF (European Disability Forum - Foro Europeo de la Discapacidad) crea un Grupo de Trabajo sobre Mujer que concluye con un Manifiesto de las mujeres con discapacidad de Europa, adoptado en Bruselas el 22 de febrero de 1997, con una recopilación de recomendaciones destinadas a mejorar la vida de las mujeres y niñas con discapacidad de la Unión Europea.
"Las mujeres con discapacidad estaban en un terreno de nadie y con el manifiesto de mujeres con discapacidad en Europa se puso sobre la mesa la necesidad de trabajar las políticas de discapacidad con un enfoque de género", afirma Isabel Caballero.
El propósito principal de este Manifiesto, según el estudio del OED, "es informar y alertar a las mujeres y niñas con discapacidad sobre su situación, sus derechos y sus responsabilidades. Pero, además, pretende sensibilizar a la Comisión Europea, el Parlamento Europeo, los Estados miembros, el movimiento europeo de personas con discapacidad y el movimiento de mujeres sobre la falta de atención a las diferencias por razón de género entre mujeres/niñas con discapacidad y hombres/niños con discapacidad. El Manifiesto en última instancia constituye además una herramienta para la capacitación de las mujeres con discapacidad".
En nuestro país, según la autora de este estudio "hay que hacer un gran reconocimiento a muchas organizaciones de discapacidad que llevan trabajando dos décadas, son organizaciones de base, algunas con una estructura ya autonómica, como ocurre en Andalucía o Cataluña, y han hecho un gran trabajo de visibilidad y de denuncia".
El CERMI y la Fundación CERMI Mujeres
El CERMI ha trabajado en temas de mujer con discapacidad desde sus inicios, hace dos décadas, y es además el impulsor de la creación de la FCM, en 2014. La importancia de esta cuestión es definitiva, tal y como expresaba el presidente del CERMI, Luis Cayo Pérez Bueno, en una entrevista en este boletín: "No habrá normalidad cívica democrática de las personas con discapacidad si no está resuelto o, al menos, encauzado el tema de la mujer con discapacidad"
La autora del estudio hace un reconocimiento reiterado al papel de las organizaciones de mujer con discapacidad en nuestro país, pero reconoce que "la creación de la FCM ha servido de revulsivo porque le ha dado una visibilidad notoria a nivel estatal y con una excelencia de calidad en el trabajo y generación de conocimientos ya que en poco tiempo se han hecho investigaciones muy interesantes y se ha generado un conocimiento que nos sirve de herramienta para hacer incidencia política. Llevamos poco tiempo, pero la capacidad de impacto social que ha tenido la FCM ha hecho que se ponga ya en la agenda política las demandas de las mujeres con discapacidad".
Las principales entidades que conforman el CERMI merecen un espacio propio en este estudio donde se expone el papel de cada una de ellas en este impulso o eclosión para situar a la mujer con discapacidad en un espacio necesario. Así se recogen las iniciativas de la CNSE, que en 1994 crea la Comisión de la Mujer y detalla algunas de sus acciones más destacadas. Cocemfe aparece como una de las plataformas representativas de personas con discapacidad, junto con la CNSE, pioneras y más activas en la reivindicación de la igualdad de género en el sector de la discapacidad en España. Así, según el estudio, "el activismo de ciertas lideresas pertenecientes a Cocemfe que detentaban cargos de responsabilidad política en diversos territorios del país impulsó la toma en consideración de las cuestiones de género en el accionar de esta Confederación. De hecho, organizaciones de mujeres con discapacidad física como Dones No Estàndards o la Federación para la Promoción de la Mujer con Discapacidad - LUNA Andalucía incidieron de manera fundamental el trabajo de Cocemfe en años posteriores y que culminaría con la creación de la Confederación Estatal de Mujeres con Discapacidad (CEMUDIS)".
La serie de organizaciones que trabajaron en el campo de mujer y discapacidad continúa con el detalle de la labor de entidades como Plena inclusión, ONCE y su fundación, Fasocide, Down España, Salud Mental España, Fedace, Fiapas y Predif.
Pero cabe destacar también la acción que llevaron a cabo, y hoy continúa, los CERMIS Autonómicos a través de sus Comisiones de Mujer, como indica Isabel Caballero: "Los CERMIS Autonómicos han tenido un desarrollo desigual, algunas comunidades autónomas han trabajado muchísimo en los últimos años y el trabajo interno ha sido importante en alguno de ellos, que han apoyado la creación de entidades de mujeres con discapacidad, incluso las ha acogido en su red".
La comisionada de CERMIS Autonómicos, Teresa Palahí, también reconoce el acierto en la creación de la FCM y la importante labor que deben asumir los CERMIS en sus territorios: "La creación de la FCM es una de las mejores decisiones que ha tomado el CERMI y los CERMIS Autonómicos deben implicarse con los agentes de la zona, trabajar con esos objetivos de favorecer el bienestar y la calidad de vida de las mujeres con discapacidad, y de avanzar en la igualdad de oportunidades y el ejercicio de sus derechos. Tenemos que llegar a las mujeres con discapacidad de manera directa, hay que conseguir esa proximidad y que la mujer con discapacidad, esté donde esté en el territorio nacional, también en medios rurales, pueda percibir el apoyo de la FCM a través de red mediante, incluso, servicios que favorezcan su crecimiento personal para poder desarrollarse".
Organizaciones impulsoras
Pero la participación en la sociedad civil de las mujeres con discapacidad en defensa de sus derechos no solamente ha sido llevada a cabo a través de vocalías o comisiones de la mujer en entidades mixtas, sino que también, y de manera pionera, las mujeres de este sector crearon entidades específicas solo de mujeres para denunciar las situaciones de exclusión que seguían sufriendo casi cuatro millones de mujeres en España.
Estas organizaciones surgen en la década de los 90 a la luz de las recomendaciones de la Conferencia Internacional de Beijing y de la aparición del I Manifiesto de Mujeres con Discapacidad en Europa. Entre las entidades de referencia el estudio del OED señala el trabajo de denuncia y visibilización de las demandas de este sector de la población realizado por:
Asociación Regional Andaluza de Mujeres Sordas (Aramus) 1997
Asociación Dones no Estàndards 1995
LUNA Andalucía, integrada por ocho asociaciones provinciales. 2000
Amdas-La Fonte asociación de mujeres con discapacidad Asturias 2001
Federación Regional LUNA Castilla-La Mancha 2009
Mujeres en movimiento Comunidad Valenciana
Asociación Aragonesa de Mujeres con Discapacidad, Amanixer 2013
Acadar. La Asociación de Mulleres con Discapacidade de Galicia 2009
La Asociación Extremeña de Mujeres con Discapacidad (AEMDI) 2015
Más Mujer Murcia, mujeres con discapacidad física y orgánica Región de Murcia 2014
Confederación Estatal de Mujeres con Discapacidad (CEMUDIS) 2010
FCM 2014