El acto de apertura corrió a cargo del presidente del EDF, Yannis Vardakastanis, que denunció los casos de institucionalización de las niñas y los niños y jóvenes con discapacidad en muchos países europeos y exigió que se pusieran en marcha políticas destinadas a facilitar la vida en la comunidad en cumplimiento de lo dispuesto por la Convención de los Derechos de la Personas con Discapacidad.
Hay que recordar que el 'Comité de personas expertas sobre los derechos de las personas con discapacidad' de Naciones Unidas ha recomendado a la Unión Europea incorporar la perspectiva y las necesidades de las y los niños con discapacidad en la próxima Agenda de la Unión sobre los derechos de la infancia.
El presidente del EDF exigió asimismo que la UE adopte la normativa sobre igualdad de trato y que ratifique el Convenio del Consejo de Europa sobre prevención y lucha contra la violencia contra las mujeres y la violencia doméstica aprobado en Estambul en el año 2011.
Rosangela Berman Bieler, de Unicef, presentó algunos datos sobre la institucionalización de las y los niños con discapacidad y señaló que "estos menores de edad tienen diecisiete veces más probabilidades de acabar viviendo en una institución si se compara con las y los niños sin discapacidad".
Por su parte, la Agencia de Derechos Fundamentales (FRA) presentó un nuevo informe sobre la violencia contra las y los niños con discapacidad haciendo hincapié en la falta de datos y la inexistencia de estudios sobre este tema y denunciando el problema de la violencia contra las y los menores de edad con discapacidad.
Además, en el marco de esta conferencia se dio entrega del premio europeo Ciudad Accesible. Han sido ciudades finalistas este año Kaposvár (Hungría), Milán (Italia), Toulouse (Francia), Vaasa (Finlandia) y Wiesbaden (Alemania). La ciudad ganadora fue finalmente Milán.