En el reciente módulo de formación "La Perspectiva de Género en el Ámbito de la Discapacidad", organizado por la fiscalía general del Estado, Isabel Caballero Pérez, directora ejecutiva de la Fundación CERMI Mujeres, estuvo encargada de impartir el tema “La discapacidad con perspectiva de género. Violencia doméstica, de género y discriminación estructural".
Durante su presentación, Caballero subrayó la necesidad de implementar figuras como el facilitador procesal en el sistema judicial español. Este rol es esencial para garantizar que las mujeres con discapacidad que denuncian violencias machistas no sean revictimizadas durante el proceso judicial.
"El facilitador procesal no solo proporciona el apoyo necesario para navegar por el sistema de justicia, sino que también asegura que estas mujeres sean comprendidas y tratadas con el respeto y la sensibilidad que merecen, evitando así la doble victimización," explicó.
En el contexto de la atención a mujeres víctimas de violencia, una barrera significativa que a menudo enfrentan las mujeres con discapacidad es la accesibilidad limitada dentro del sistema de justicia. Este déficit no solo se manifiesta en la infraestructura física, sino también en la capacidad institucional para adaptarse a las necesidades específicas de este grupo. A esto se suma un entorno judicial que puede percibirse como desalentador y a veces incluso hostil, lo cual puede disuadir a las mujeres con discapacidad de buscar el apoyo y la protección legal que necesitan. Esta situación señala la importancia de reformas inclusivas y sensibles que no solo reconozcan, sino que activen y faciliten efectivamente, el derecho de todas las mujeres a acceder a la justicia de manera equitativa y digna.
Este módulo es parte de un esfuerzo continuado por parte de la fiscalía general del Estado para integrar la perspectiva de género en su funcionamiento, buscando una aplicación de la justicia más inclusiva.
